- Comunidad de Reino
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Peña Profética SIGAMOS EL CAMINO. Entender la voluntad de Dios Padre para nuestra vida cuesta, porque tenemos que enfrentar nuestra incredulidad, rebeldía, orgullo, doble ánimo y terquedad. EL CAMINO. No queramos volver a esclavizarnos, no importa lo que tengamos que enfrentar, es mejor seguir que retroceder. EL CAMINO. Se nos mandó avanzar, tenemos que obedecer el mandato, solo Él conoce los resultados. EL CAMINO. El siempre auspiciará Su misión, no nos desenfoquemos por el tonto humanismo. EL CAMINO.

Números 13:25-33

“Y volvieron de reconocer la tierra al fin de cuarenta días. Y anduvieron y vinieron a Moisés y a Aarón, y a toda la congregación de los hijos de Israel, en el desierto de Parán, en Cades, y dieron la información a ellos y a toda la congregación, y les mostraron el fruto de la tierra. Y les contaron, diciendo: Nosotros llegamos a la tierra a la cual nos enviaste, la que ciertamente fluye leche y miel; y este es el fruto de ella. Mas el pueblo que habita aquella tierra es fuerte, y las ciudades muy grandes y fortificadas; y también vimos allí a los hijos de Anac. Amalec habita el Neguev, y el heteo, el jebuseo y el amorreo habitan en el monte, y el cananeo habita junto al mar, y a la ribera del Jordán. Entonces Caleb hizo callar al pueblo delante de Moisés, y dijo: Subamos luego, y tomemos posesión de ella; porque más podremos nosotros que ellos. Mas los varones que subieron con él, dijeron: No podremos subir contra aquel pueblo, porque es más fuerte que nosotros. Y hablaron mal entre los hijos de Israel, de la tierra que habían reconocido, diciendo: La tierra por donde pasamos para reconocerla, es tierra que traga a sus moradores; y todo el pueblo que vimos en medio de ella son hombres de grande estatura. También vimos allí gigantes, hijos de Anac, raza de los gigantes, y éramos nosotros, a nuestro parecer, como langostas; y así les parecíamos a ellos.”

Ps. Damaris Tavarez de Mota

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