27 Ene
Peña Profética LA GLORIA ES DE DIOS PADRE. Cuando vivimos mostrando el Reino a los demás, estamos honrando y alabando a Dios Padre. GLORIA. No sólo por las palabras estaremos en lo cierto sino por nuestros frutos, ellos hablan mejor que lo que podamos decir. GLORIA. Sirvamos al Ministerio fielmente sin medir sacrificios. GLORIA. Dios Padre nos envío y Él nos respaldará a donde quiera que vallamos, confiemos sin temor. GLORIA.
Salmo 146:1-10
“Alaba, oh alma mía, a Jehová. Alabaré a Jehová en mi vida; Cantaré salmos a mi Dios mientras viva. No confiéis en los príncipes, Ni en hijo de hombre, porque no hay en él salvación. Pues sale su aliento, y vuelve a la tierra; En ese mismo día perecen sus pensamientos. Bienaventurado aquel cuyo ayudador es el Dios de Jacob, Cuya esperanza está en Jehová su Dios, El cual hizo los cielos y la tierra, El mar, y todo lo que en ellos hay; Que guarda verdad para siempre, Que hace justicia a los agraviados, Que da pan a los hambrientos. Jehová liberta a los cautivos; Jehová abre los ojos a los ciegos; Jehová levanta a los caídos; Jehová ama a los justos. Jehová guarda a los extranjeros; Al huérfano y a la viuda sostiene, Y el camino de los impíos trastorna. Reinará Jehová para siempre; Tu Dios, oh Sion, de generación en generación. Aleluya.”
Ps. Mirna Franco de Severino