10 Jul
Peña Profética ENCONTRANDO EL REINO. Andábamos errantes, insatisfechos y sedientos, pero solo en el Reino encontramos la vida que Él prometió que nos daría a través de Su Espíritu. REINO. El ministerio se constituye en esa ciudad habitable aquí en la tierra, donde nos quitan toda hambre, sed, ocio y vacío. REINO. No tenemos que esperar partir de este mundo para disfrutar de las maravillas de Su libertad. REINO. Clamar a Dios Padre y recibir Su ayuda se traduce a ser constantes en nuestra conexión Apostólica y Profética. REINO.
Salmos 107:4-14
“Anduvieron perdidos por el desierto, por la soledad sin camino, Sin hallar ciudad en donde vivir. Hambrientos y sedientos, Su alma desfallecía en ellos. Entonces clamaron a Jehová en su angustia, Y los libró de sus aflicciones. Los dirigió por camino derecho, Para que viniesen a ciudad habitable. Alaben la misericordia de Jehová, Y sus maravillas para con los hijos de los hombres. Porque sacia al alma menesterosa, Y llena de bien al alma hambrienta. Algunos moraban en tinieblas y sombra de muerte, Aprisionados en aflicción y en hierros, Por cuanto fueron rebeldes a las palabras de Jehová, Y aborrecieron el consejo del Altísimo. Por eso quebrantó con el trabajo sus corazones; Cayeron, y no hubo quien los ayudase. Luego que clamaron a Jehová en su angustia, Los libró de sus aflicciones; Los sacó de las tinieblas y de la sombra de muerte, Y rompió sus prisiones.”
Ps. Carolina Cruz