- Comunidad de Reino
20990
post-template-default,single,single-post,postid-20990,single-format-standard,theme-bridge,bridge-core-3.1.2,the7-core-ver-2.7.7,qi-blocks-1.3.2,qodef-gutenberg--no-touch,woocommerce-no-js,tribe-no-js,mega-menu-popup-navigation,qodef-qi--no-touch,qi-addons-for-elementor-1.7.8,qode-page-transition-enabled,ajax_updown_fade,page_not_loaded,,qode_grid_1400,vss_responsive_adv,vss_width_768,qode-overridden-elementors-fonts,columns-4,qode-child-theme-ver-27.3.1649007747,qode-theme-ver-30.7,qode-theme-bridge,disabled_footer_top,disabled_footer_bottom,wpb-js-composer js-comp-ver-7.9,vc_responsive,elementor-default,elementor-kit-23226

Peña Profética CON OJOS ESPIRITUALES. Conectar a esta verdad nos libra de ser títeres del mal, se derriban las fortalezas y todo argumentos diabólicos. ESPIRITUALES. No podemos persistir en nuestra necedad para que nuestro aguijón no nos estanquen, mejor y de buenas ganas entendamos, ya tenemos el conocimiento. ESPIRITUALES. Cuando damos el derecho al Padre lo que opera se manifiesta y da origen a nuestro proceso de liberación, porque fuimos sacados de las tinieblas a Su luz admirable. ESPIRITUALES. Somos escogidos, nos toca ir y sanar a los que dañamos para que reciban por medio de la fe, perdón de pecados y herencia eterna. ESPIRITUALES.

Hechos 26:12-18

“Ocupado en esto, iba yo a Damasco con poderes y en comisión de los principales sacerdotes, cuando a mediodía, oh rey, yendo por el camino, vi una luz del cielo que sobrepasaba el resplandor del sol, la cual me rodeó a mí y a los que iban conmigo. Y habiendo caído todos nosotros en tierra, oí una voz que me hablaba, y decía en lengua hebrea: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? Dura cosa te es dar coces contra el aguijón. Yo entonces dije: ¿Quién eres, Señor? Y el Señor dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues. Pero levántate, y ponte sobre tus pies; porque para esto he aparecido a ti, para ponerte por ministro y testigo de las cosas que has visto, y de aquellas en que me apareceré a ti, librándote de tu pueblo, y de los gentiles, a quienes ahora te envío, para que abras sus ojos, para que se conviertan de las tinieblas a la luz, y de la potestad de Satanás a Dios; para que reciban, por la fe que es en mí, perdón de pecados y herencia entre los santificados.”

Ps. Reyna Fulgencio de Reinoso

Comentarios

Comentarios