- Comunidad de Reino
22084
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Peña Profética ABRAMOS LOS OJOS. Los del Reino sufrirán violencia porque el mal quiere entretenernos y desviarnos de nuestra riqueza. ABRAMOS. Cuando asumimos los Principios del Manual de Vida se puede ver todo con mayor claridad. ABRAMOS. Dios Padre pondrá todo en su lugar si le damos el derecho legal, así tendremos autoridad y no seremos de doble ánimo. ABRAMOS. La salida está en seguir aquel que murió en la cruz, Él es la verdad, Él es el camino y Él es la vida y solo así podremos ir a nuestro destino eterno. ABRAMOS.

2 Reyes 6:8-17
“Tenía el rey de Siria guerra contra Israel, y consultando con sus siervos, dijo: En tal y tal lugar estará mi campamento. Y el varón de Dios envió a decir al rey de Israel: Mira que no pases por tal lugar, porque los sirios van allí. Entonces el rey de Israel envió a aquel lugar que el varón de Dios había dicho; y así lo hizo una y otra vez con el fin de cuidarse. Y el corazón del rey de Siria se turbó por esto; y llamando a sus siervos, les dijo: ¿No me declararéis vosotros quién de los nuestros es del rey de Israel? Entonces uno de los siervos dijo: No, rey señor mío, sino que el profeta Eliseo está en Israel, el cual declara al rey de Israel las palabras que tú hablas en tu cámara más secreta. Y él dijo: Id, y mirad dónde está, para que yo envíe a prenderlo. Y le fue dicho: He aquí que él está en Dotán. Entonces envió el rey allá gente de a caballo, y carros, y un gran ejército, los cuales vinieron de noche, y sitiaron la ciudad. Y se levantó de mañana y salió el que servía al varón de Dios, y he aquí el ejército que tenía sitiada la ciudad, con gente de a caballo y carros. Entonces su criado le dijo: ¡Ah, señor mío! ¿qué haremos? Él le dijo: No tengas miedo, porque más son los que están con nosotros que los que están con ellos. Y oró Eliseo, y dijo: Te ruego, oh Jehová, que abras sus ojos para que vea. Entonces Jehová abrió los ojos del criado, y miró; y he aquí que el monte estaba lleno de gente de a caballo, y de carros de fuegoalrededor de Eliseo.”

Ps. Alejandro Ramos

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