
27 Jun Peña Profética EL FIN DEL DISCURSO
Toda su verdad se centra en dos temas esenciales, temerle a Él y asumir Su palabra, FIN. No nos afanemos tanto, dejemos que el manual de vida nos moldee literalmente, FIN. Fuimos llamados anunciar Su reino, es tiempo de actuar, FIN. Demos importancia a lo que realmente vale la pena, porque TODO es vanidad y aflicción de espíritu, FIN.
Eclesiastés 12:9-14
“Y cuanto más sabio fue el Predicador, tanto más enseñó sabiduría al pueblo; e hizo escuchar, e hizo escudriñar, y compuso muchos proverbios. Procuró el Predicador hallar palabras agradables, y escribir rectamente palabras de verdad. Las palabras de los sabios son como aguijones; y como clavos hincados son las de los maestros de las congregaciones, dadas por un Pastor. Ahora, hijo mío, a más de esto, sé amonestado. No hay fin de hacer muchos libros; y el mucho estudio es fatiga de la carne. El fin de todo el discurso oído es éste: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre. Porque Dios traerá toda obra a juicio, juntamente con toda cosa encubierta, sea buena o sea mala.”
Ps. Jonathan Soto