Peña Profética POR SU MUERTE - Comunidad de Reino
4928
post-template-default,single,single-post,postid-4928,single-format-standard,theme-bridge,bridge-core-3.1.2,the7-core-ver-2.7.7,qi-blocks-1.3.3,qodef-gutenberg--no-touch,woocommerce-no-js,tribe-no-js,mega-menu-popup-navigation,qodef-qi--no-touch,qi-addons-for-elementor-1.8.1,qode-page-transition-enabled,ajax_updown_fade,page_not_loaded,,qode_grid_1400,vss_responsive_adv,vss_width_768,qode-overridden-elementors-fonts,columns-4,qode-child-theme-ver-27.3.1649007747,qode-theme-ver-30.8.2,qode-theme-bridge,disabled_footer_top,disabled_footer_bottom,wpb-js-composer js-comp-ver-7.9,vc_responsive,elementor-default,elementor-kit-23226

Peña Profética POR SU MUERTE

Peña Profética POR SU MUERTE

Nos dio vida cuando andabamos muertos en nuestros delitos y pecados, viviendo perdidamente, MUERTE. Hoy tenemos libre acceso al trono de la gracia y a todo lo que Su muerte proveyó para nosotros, MUERTE. Fue herido por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados, el castigo de nuestra paz fue sobre El y por sus llagas fuimos curados, MUERTE. Hoy podemos disfrutar de salud, paz, riqueza integral y una vida eterna, MUERTE.

Isaías‬ ‭53:2-7

“Subirá cual renuevo delante de él, y como raíz de tierra seca; no hay parecer en él, ni hermosura; le veremos, mas sin atractivo para que le deseemos. Despreciado y desechado entre los hombres, varón de dolores, experimentado en quebranto; y como que escondimos de él el rostro, fue menospreciado, y no lo estimamos. Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados. Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros. Angustiado él, y afligido, no abrió su boca; como cordero fue llevado al matadero; y como oveja delante de sus trasquiladores, enmudeció, y no abrió su boca.”

‭‭

Ps. Maritza Calzado de Figuereo 

Comentarios

Comentarios